el cráneo y sus partes
En la séptima cervical los procesos transversos están ausentes; la apófisis transversa es achicada y no hay canales vertebroarteriales. Sólo se observó variación en la sexta y séptima vértebras, que tienen la posibilidad de enseñar un par de espinas dorsales siguientes paralelas. Los ceratobranquiales son cinco huesos pareados que forman la rama inferior de cada arco branquial. Los tres primeros son de manera rectangular, alargada y levemente aplanada, cada uno articulado proximalmente con un hipobranquial y distalmente con un epibranquial.
(Fig. 13) Esta zona además presenta elevaciones y depresiones generadas por los giros y surcos del lobo de adelante del cerebro. Está constituida por la región superior del de adelante, los parietales, la parte más superior de la escama de los temporales y la escama del occipital hasta la protuberancia occipital externa. Recorriendo su superficie en sentido anteroposterior observamos en la línea mediana la cresta frontal (Fig. 04) y el surco para el seno longitudinal superior. Por lateral y en relación a este atravieso están las fositas granulares (Fig. 05) donde se alojan las granulaciones aracnoideas. Cerca del ángulo posterosuperior del parietal se ubican los orificios parietales (Fig. 05).
Sistema Inquieto Central Y Periférico
La articulación fémur-tibia muestra, además de la patela, dos sesamoideos, uno pequeñísimo y aplanado que descansa sobre la parte de atrás lateral del fémur y otro, de tamaño menor, colocado posterior al primero. Del radical posterior del manubrio, muy cerca de la articulación con el mesoesternón, parten dos proyecciones cartilaginosas laterales que articulan con el segundo par de costillas.
Una tercera cresta se presenta en la parte de atrás de la epífisis proximal. La epífisis proximal del radio posee 2 facetas, la parte media del capítulo del húmero se inserta entre ellas. El flanco del costado de la diáfisis es recorrido por una cresta que llega prácticamente al nivel de la inserción de la ulna. La epífisis distal es cóncava en su parte de atrás y convexa anteriormente, con los bordes altísimos y curvados hacia adentro; se ensancha solamente para formar la articulación con los carpos. En la epífisis distal el epicóndilo medial y su desarrollo espinoso son distinguibles, si bien el primero es muy achicado; el segundo, en cambio, es ancho en su base y se estrecha un poco distad, finalizando en una punta roma.
Con lo previo, se puede acabar que Bramocharax caballeroi y Astyanax mexicanus son especies muy similares en su esqueleto cefálico; no obstante las diferencias más visibles son que el cráneo de B. Caballeroi es oval, debido a la longitud los huesos que conforman el hocico (etmoides, vómer, etmoides lateral, mandíbula, maxila, premaxila, ecto y mesopterigoides), además del de adelante y de los circunorbitales.
el cráneo y sus partes
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Sobre la escotadura nasal, ubicada en la parte de abajo de la línea media se aprecia una eminencia llamada giba frontal media o glabela, a los lados de ésta parten 2 salientes, arqueadas; los arcos superciliares. Por encima de estos, 2 excelencia planas llamadas gibas frontales laterales. En relación a la lámina cribosa del etmoides, observamos los orificios olfatorios, la hendidura y el orificio etmoidal (elementos ya vistos por el endocráneo) y el ostium del seno esfenoidal. Por lateral y en relación a la cavidad orbitaria encontramos los agujeros etmoidales anterior y posterior, (Fig. 29) el canal óptico (Fig. 31) y la fisura orbitaria superior. Con relación a la región del orificio magno podemos admitir el orificio del canal del hipogloso (Fig. 19) . La parte superior del cráneo que se relaciona con el cuero cabelludo se denomina calvaria. El segmento inferior llamado base craneal está articulado con los huesos de la cara en la parte anterior y con la columna vertebral en su porción posterior.
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Oh, ya te digo!! -saca el rostro del pelo del lobo, de acuerdo con él-.
Si viese un dinosaurio me volvería loco. Aunque no le haría mimos a un dinosaurio. Pero es que tú eres un peluche, no me jodAS.-sonrió y volvió a enterrar el rostro en su cuello, apoyado sobre él. >
— 𝐌𝐚u. (@brattyfuck) March 8, 2020
Las vértebras en conjunto delimitan el conducto raquídeo, presentan un agujero central y unas pequeñas protuberancias, las apófisis, en donde se unen los músculos. En el metacarpal IV la epífisis proximal tiene un atravieso posterior en el que articula el desarrollo anterodorsal del V, su desarrollo proximal presenta un gancho que se curva posterad y articula en un atravieso posterior del unciforme. La epífisis distal de todos ellos termina en un cóndilo que articula con la falange I pertinente. En general, la manera de la escápula se ciñe a un patrón morfológico aproximadamente constante, donde las diferencias son mucho más visibles en tamaño que en forma. La profundidad de las crestas y valles y la predisposición de las facetas son muy variables; el tubérculo glenoideo sigue aproximadamente incesante, no de esta forma el contorno de la escápula que es muy variable, más que nada en sus partes posterior y del costado. Sin embargo, desde el criterio cuantitativo, la escápula es uno de los elementos con más bajo coeficiente de variación (López-González & Polaco, 1998).
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